Queridas amigas!
En este último mes han pasado muchas cosas y nada buenas,
problemas de salud uno detrás de otro en mi familia y sin pensar
que acabaría mal.
Esta Semana Santa ha sido la más dolorosa de mi familia,
pues el Martes Santo mi papa nos dejó y no tengo palabras para
deciros el dolor tan grande que tengo en mi interior.
Papa, ahora mi corazón lo cubre un manto oscuro,
pero más adelante tu luz iluminara mis recuerdos.